SAGA DIVERGENTE: LEAL (3/3)

Vuelvo a aclarar: voy a separar esta reseña en cuatro puntos: «de qué se trata», «opinión», «nota» y «conclusión». Sólo «opinión» tiene spoilers; el resto pueden leerlo sin problemas si no leyeron ya el libro. Están avisados!

GÉNERO: Distopía, Aventuras.

AUTOR: Veronica Roth.

PERSONAJE FAVORITO: Christina, Uriah.

PERSONAJE ODIADO: Tris.

DE QUÉ SE TRATA:

Tris, Tobias y amigos, tras ver el video que Jeanine escondía en secreto, deciden ir del otro lado del muro para descubrir la verdad de la ciudad y aprender sobre este nuevo y más grande mundo lleno de mentiras y dolor que no es mejor que el que dejaron atrás. Decididos a hacer lo correcto, ellos arriesgarán todo por la libertad y sus seres amados…

OPINIÓN:

Tras mi intento de leer Insurgente y fracasar la primera vez, me había rendido con esta saga. El primer libro había sido genial pero el segundo era un desastre (denso, aburrido y reiterativo).

Sin embargo, la llegada de la saga al cine cambió eso. Ahora, a sólo dos meses de estrenarse la segunda película, me decidí a leer los libros antes de ver su formato cinematográfico. Regresé al segundo libro y lo terminé con mucho esfuerzo y, tras una breve pausa, por fin tomé el último volumen.

El tercer libro está bien, pero no es ni de lejos tan bueno como el primero. Divergente me dejó con una sensación placentera de haber leído una gran nueva historia, la emoción de lo nuevo y la ansiedad de saber más de este mundo. Sin embargo, no fue una emoción arrolladora, porque no corrí a leer el segundo. Leal pone el sello a esta saga que comencé en el verano de 2012, hace ya tres años.

Debo admitir que lo mejor que tiene este final es que se mantiene interesante en cada capítulo. La adrenalina no baja y, aunque no logró mucho contagiarme de ella, no hubo capítulos que reprocharles su inutilidad.

Fue una buena conclusión. La muerte de Tris no fue una sorpresa (esto es enteramente culpa de las redes sociales y mi poca predisposición para terminar esta saga, lo que me spoileo sobre este suceso), así que posiblemente el libro perdió su gran boom para mí. Básicamente era un hecho que estaba esperando desde la primera página. Y tengo que admitir que lo estaba esperando con ansias.

El personaje de Tris llegó a irritarme tanto como en Insurgente. Mientras que en el segundo era insoportable gracias a su depresión, miedo a las armas y conflictos con Tobias, acá está su maldita creencia de que siempre tiene la razón, ella es la única que ve las cosas claras y todos tienen que seguirla. Aunque por momentos se da cuenta de sus errores, no sentí que hubiera en ella un verdadero crecimiento. Es decir, sí, se hace más fuerte para conllevar el dolor y la perdida, pero definitivamente no le queda una pizca de modestia. Cree que tiene la razón y que sus instintos son los únicos que funcionan, y que la realidad le dé la razón no hace más que enfurecerme. Roth, no tendrías que haberle dado la corona de la verdad a un personaje solo. Ella tendría que haberse equivocado para tener un golpe de humildad, aunque sea en cosas pequeñas, al menos para que ella no fuera la única que podía estar en lo cierto.

Y el mayor error que creo cometió la autora fue que el suero de la muerte no actuara sobre ella. Hubiera preferido que funcionara más lentamente o que tuviera otra reacción en ella, pero que al final hubiera sido eso lo que la matara y no dos disparos. ¿Por qué? Porque ella queda como una especie de súper-soldado, incluso capaz de superar una súper fórmula, incluso cuando todos los que son Puros Genéticos como ella no pueden. O sea, ¿por qué ella sí?

Sus conflictos con Tobias siguieron molestándome, llevándome a pensar que se pasan más peleando que teniendo momentos lindos y amables con el otro. Supongo que eso es lo que sucede con dos personalidades fuertes y en desigualdad de opiniones como ellos, pero se necesitaba un descanso de sus constantes desacuerdos y éste sólo existió luego del sexo.

Tobias, por otro lado, es un personaje que por momentos me cansaba y por otro me llamó mucho la atención. Su inseguridad y su necesidad de amor parental me sacaron de quicio a veces, porque parecía que no podía pensar por sí mismo. Sin embargo, también fue un respiro hacia estos personajes cuasi-perfectos (coff, Tris, coff) y también una dosis de realismo. Para una persona tan traumada emocionalmente por sus propios padres, ocultándose bajo una coraza de seriedad y violencia, Tobias tiene enterradas buenas cantidades de inseguridad y necesidad de aprobación y eso es lo que hace a un personaje complejo y atractivo. No logra ganarse un gran cariño en mí, pero tengo que admitir que es el personaje con el que más me sentí identificada y me convenció de que podría ser real.

La trama sobre los Puros y Dañados me pareció bastante pobre y no entendí muy bien lo de la Guerra de Purificación, pero no puedo negar que es muy atractivo ver como el mundo del afuera y del experimento no son tan diferentes: demuestra una de las características más horribles y reales de la humanidad, el rechazar al que es diferente y hacerlo sentirse inferior.

Sin embargo, es claro que los Dañados tenían tantas capacidades como los Puros y esta discriminación me pareció un tanto injustificada, así como que fuera el gobierno el que aprobara el suero de simulación de ataque que acabó con Abnegación. Se llenan las bocas de palabras de que ellos, los Puros, son los que limpiarán el mundo porque tienen los genes limpios pero ¿permiten un genocidio? O son todos una manga de hipócritas sociópatas o su lógica no tiene demasiado sentido.

Pero, dentro de todo, el libro está bueno y es una buena conclusión para la saga. El único problema que encontré en cuanto a redacción fue que, como la historia está contada desde el punto de vista de Tris y Tobias, sus voces deberían diferenciarse más allá de que el capítulo nos avise quién va a hablar. Roth no logra marcar diferencia entre sus voces y eso es un error, porque por momentos me olvidaba de quién estaba hablando y no lograba distinguirlos.

Por otro lado, este libro me recordó un montón a Los Juegos del Hambre, con la ciudad vigilada por cámaras como un show de televisión, el hecho de tener dos lugares en conflicto (Capitolio y Distritos), las revoluciones, el ejército y demás. Ahora podemos confirmar que Roth realmente se inspiró en esta saga para hacer la suya.

CONCLUSIÓN:

Buena conclusión para una buena saga.  No afloja demasiado la tensión y la acción, que son ingredientes ideales para un cierre. Tiene cosas inesperadas (aunque las redes sociales se encargaron de arruinarme la sorpresa) que son refrescantes a todas esas sagas con finales felices. Cuotas de realismo y aventura por igual, con crecimiento de personajes. Un buen trabajo.

YO…
LEERÉ EL SIGUIENTE?: -
LO COMPRARÉ?: No.
LO RE-LEERÉ?: Lo dudo. No veo los motivos.
LO QUEMARÉ?: No.
LO EXORCISARÉ?: Sólo a Tris.

RENOMBRADO COMO: Tris todo lo puede.

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